lunes, 29 de junio de 2015

Cepeda al Picu Urriellu

                                              ESCALADAS DE UN NO ESCALADOR








 Hace un par de años, cuando subí con Oscar al Urriellu por su cara sur, me prometí que no iba a volver a este monte. Me pareció una ruta muy expuesta a la caída de piedras por la cantidad de gente que llevas encima. También me plantee lo de escalar, no me termino de sentir cómodo en la pared.

 Cuando este jueves Mikel me llamo por teléfono para proponerme subir de nuevo, pero esta vez por su cara este, por la cepeda, no supe muy bien como reaccionar. Fue como un bofetón pero sin hacer daño, me pillo por sorpresa y me dejo un poco aturdido. Si, claro que quería, el tiempo hace olvidar lo malo y solo mantiene el sabor de los buenos momentos. Pero por otro lado suponía dejar en tierra a un buen amigo, que justo este fin de semana no podía. Pero los planes surgen cuando surgen, y aunque a mi me jodia mucho que no viniera, estoy seguro que a el le jodio mucho mas.

 En fin, que al final me anime, junto a Mikel y Ainhoa, demostrando que tengo menos palabra que un político en campaña!!

 Salimos el viernes por la tarde de Iruñea, camino a Asturias, dejandome toda la comida en casa, por que si tengo poca palabra, de cabeza creo que voy parecido. Llegamos a Sotres y de ahí a Pandebano donde hicimos noche. A Eso de las 8 de la mañana nos pusimos en marcha, teníamos un buen paseo por delante hasta llegar a pie de pared. Conforme nos acercábamos, íbamos valorando la nada descabellada posibilidad de encontrar la vía llena de cordadas. Para nuestra sorpresa, aunque había varias cordadas en la pared, solo una estaba en nuestra ansiada vía, saliendo de la primera reunión. Mayor fue la sorpresa cuando después de dos largos se pasaron a otra vía, así que no llevábamos a nadie por delante, y tampoco achuchandonos por detrás.

 No me voy a poner a dar explicaciones técnicas acerca de la vía, una vía abierta en 1955, de la que ya esta todo escrito y en Internet se pueden encontrar cientos de reseñas. Pero si mi experiencia en esta pared. Comenzamos la vía un poco a la derecha de la entrada original, evitando así un nevero que hay en la base. Los dos primeros largos sencillos, placas tumbadas de canalizos. La cosa cambia en la llegada a la segunda reunión, un pasito para entrar en la chimenea. En el tercer largo se acabo lo divertido cuando toco arrastrarse con la mochila por una estrecha chimenea, que me hizo sudar de lo lindo subiéndola en apnea, por lo visto no estoy preparado para respirar mientras pienso como escalar. El 4º y 5º largo los escale sin problema, o eso creo, con algún sitio donde navegar, como dice Mikel, pero disfrutando. El 6º es una vira en diagonal de derecha a izquierda, fácil pero de no caerse, con el péndulo que hay te plantas en la cara sur. Desde el final de la vira, sale recto el 7º largo, algo mas difícil pero se va dejando,una chimenea mas fácil que la anterior y una placa de canalizos, donde me tiemblan las garrillas solo de ver que nuestro guia y maestro se la ha recorrido entera sin poder poner ni un solo seguro. Toca el 8º largo, el mas difícil de la vía debido al famoso paso "rompetobillos". Conforme le veo a Mikel subirlo, no me queda ninguna duda de que como el dice voy a navegar, pero esta vez entre seguros. Desarrollando toda mi habilidad de marraneo en escalada, voy saltando de seguro a seguro, casi sin tocar la pared. Cuando hay que salir airoso por arriba el fin justifica los medios. Para rematar la vía solo queda pasar por el agujero que comunica con la cara sur, paso raro y divertido, una forma distinta de finalizar una vía.

 De aquí, trepando por los canales de la cara sur llegamos a la cima. Fotos y para abajo. En vez de rapelar por la linea de rapel habitual, lo hicimos por otra linea que hay justo debajo de donde termina la cepeda. Creo que fueron necesarios tres rapeles para llegar al suelo. Una vez abajo recogimos el material y vuelta al coche.

Actividad larga pero en muy buena compañía.

Mikel, Ainhoa y Mintxo.